lunes, 20 de mayo de 2013

Cap. 16, 17, 18, 19 Los Hornos de Hitler.



Alumna:  Ramírez Mejía Karen Ariatna.



Los hornos de Hitler
Capitulo XVI
“Algunos detalles de la vida detrás de las alambradas”
En finales de noviembre de 1944 disminuyo un poco la vigilancia alemana. A varios les pudo dar mejoría pues por lo mismo de no haber vigilancia la gente se podía comunicar con los de la otra vaya y para unas personas que tenían prohibido hablarse debió ser padre compartir palabras principalmente para las parejas que estaban separadas por una alambrada con electricidad por lo que podían morir al intentar atravesarse. Para ellos hacer esto era una verdadera liberación lastima que esta fuera prohibida por lo que solo fue temporal y los guardias de la S.S. se molestaban tanto de esto que cuando llegaban a verlos lo primero que hacían era dispararles a aquellos que estaban rompiendo las reglas asi le paso a una joven muy bonita de origen húngaro aproximadamente de veinte años la cual fue herida de un ojo por un disparo. Para ella lo único malo podría ser que no pudiera ver mas a su amado que se encontraba del otro lado de las vayas por lo que si ya no iba a poder ver ya no quería vivir, estaba tan enamorada que no soportaría no poder ver a su gran amor.
Todas las persona eran enumerados con un tatuaje el cual al aplicarse era muy doloroso, y cuando una persona moría su numero quedaba disponible para un nuevo internado los alemanes solo contaban hasta doscientos mil y volvían a repetir la numeración por lo que nunca se tuvo en verdadero registro de las personas, Olga tenia el numero veinticinco mil cuatrocientos tres lo que era feo para todos los internados que al tener antes una vida al igual que un nombre al llegar ahí no eras mas que un numero.  Habían diferentes tatuajes para poder identificarlos aparte de su numero.
En este mismo tiempo el exterminio fue aun mas para los internados en el campo cada vez llegaban mas personas a las que se dedicaban a poner a trabajar o a matar.






Los hornos de Hitler
Capitulo XVII
“Los métodos y su insensatez”
Como ya sabemos Auschwitz-Birkenau estaban juntos y era el campo de concentración donde las cosas que se hacían eran más pesadas o de muerte directa.
Auschwitz era especialmente de trabajo y Birkenau especialmente de exterminio.
En Auschwitz habían diferentes trabajos y grupos de personas que se dedicaban a realizar estos trabajos y habían trabajos muy pesados pero con un buen fin. Olga pertenecía al grupo esskommando integrado por los que transportaban la comida. Después de la lista Olga se iba a la cocina con sus demás compañeras para hacerse cargo de los peroles de alimentos. Tenían que cargarlos hasta el hospital que estaba casi a un kilometro. Ese trabajo era muy pesado pero era útil.
Porque a veces los alemanes eran tan malos que no había cosas que hacer pero con tal de no dejarlos descansar  les ponían a trasladar a mano un monton de de piedras  de un lugar a otro hasta que cada internada lo llenara y dos cubetas. Después regresarlas a su lugar de origen.
Existían muchos contagios pero Olga y sus demás compañeras ladeaban principalmente eran lo edemas, los flemones, los panadizos, y variedad de diarrea persistente, la foruncolosis, las manifestaciones extremas de avitaminosis y pulmonías. También había casos contagiosos de difteria, escarlatina y tifus que era propagado por millones de piojos extendidos por todo el campo.
Muchos intentaban escapar pero casi nadie lo lograba todos esperaban que alguien escapara y contara todas las horrocidades que ellos les hacían hacer solo una vez una pareja pudo escapar pero se confiaron tanto que los alemanes los agarraron y los golperon.
Tadek le conto a Olga que el quería escaparse junto con su hermano y lo lograron pero el hermano de Tadek pudo escaparse pero el no a el lo agarraron y lo castigaron además que despues lo mandaron a la cámara de gas.



Los hornos de Hitler
Capitulo XVIII
“Nuestras vidas privadas”
Aquí olga nos cuenta mas sobre la vida que pudo tener siendo parte del grupo de en la enfermería la cual en cuestión de compararse con una internada normal comun y corriente como cualquiera ellas realmente tenían muchos privilegios pues gozaban de la habitación numero 13 en la que ella compartía su koia con otra compañera además de que con todas sus compañeras se llevaba muy bien.
Entre ellas existía una con dinero dentro del campo además que le encantaba vivir en su mundo de fantasía en el que cualquier cosa se le hacia extraordinaria como comprarse diferentes vestidos usados que compraba en el mercado negro además de tener una colche de seda usada en la que tiempo después pudo regalarle una a cada una de sus compañeras.
Tenía otra compañera rubia yugoeslava la cual decía y mentía de ser una excelente medica cuando su realidad era ser dentista.
Su otra compañera llamada Rozsa era una señora que era buena para la enfermería era mayor de edad y ella se inventaba historias de amor interesantes en la que se las comunicaba a sus demás compañeras.
Otra compañera que ya conocía antes porque había sido asistente de su marido la cual solo se la pasaba preocupada por sus hermanas pues eran internadas comunes.
Tenia otra compañera dentista la cual justo antes de entra se había casado y se pasaba contándoles eso.
Magda su otra compañera de Olga quien era química de profesión era una de sus grandes amigas.
Tenia otra compañera la cual era muy pesimista lo contrario a otras de las compañeras pues exageraba mas de lo que era real.
Olga tenia secretos que no contaba a sus amigas lo cual les disgustaba pues todas las demás se contaban sus cosas por lo que le dejaron de hablar hasta su cumpleaños en el que L le regalo un cepillo dental.


Los hornos de Hitler
Capitulo XIX
“Las bestias de Auschwitz”
Existian en Auschwitz muchas personas muy malas entre ellas estaba Joseph Kramer el cual era robusto, blanco, de ojos negros penetrantes en el cual el solo se dedicaba a golpear a las personas de una manera muy cruel lo que le daba un aspecto buda. A el le encantaba liquidar a los judíos aprovechaba las oportunidades para poder matarlos.
Entre tantos también existía el doctor Mengerle, el cual era uno mas al que le encantaba acabar con lo internos del campo y aprovechaba cualquier pretexto para liquidarlos lo que a veces Olga y sus compañeras cuando el culpaba alguna y las mandaba a revisión intercambiaban a las internas para que se dieran cuenta que no todas estaban enfermas.
También existía Irma Grise quien además de ser una mujer verdaderamente bella cometía muchos desfiguros hacia las mujeres después de todo ella obtuvo su merecido en el cual sufrió demasiado. Era famosa por tener demasiados amoríos como con Mengerle y Kramer.
Entre ellos también le toco para la condena al doctor Klein quien parecía ser el mas bueno de todos, pues muchas veces defendió a las internas, se preocupo mas por ellas y muchas cosas mas sin en cambio tenia que pagar por el simple hecho de permitir lo que hicieran aunque el no estuviera tan de acuerdo.
El doctor Klein se preocupaba por Olga le dijo que iría a Transilvania que si no quería que dejara un comentario pero ella no quiso decirle, el igual le pregunto si era familia de un gran cirujano el cual era su esposo pero tampoco se atrevió a decirle la verdad pues aunque no parecía tan malo. Algo que aprendió Olga es no confiar en los alemanes y menos en los nazis.

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